Cualquier edad es buena para estudiar. Eso es, probablemente, lo que pensó Margaret Thome, una estadounidense que a los 97 años acaba de conseguir uno de los sueños de su vida. La anciana, residente del estado de Michigan, ha logrado sacarse el título de graduado en Secundaria 80 años después de tener que dejar los estudios con los que, según dice, tanto disfrutaba.
En Estados Unidos, la Educación Secundaria se compone por seis grados académicos. Los grados séptimo, octavo y noveno se corresponden con la escuela media (“Middle School”), mientras que los grados décimo, undécimo y décimosegundo forman parte de la “High School”. Una vez graduados en Secundaria (decimosegundo grado), los estudiantes estadounidenses reciben un diploma que equivale al título de Bachillerato en España, y que les permite pasar a la universidad con 18 años. En cambio, el título de Graduado en Educación Secundaria del sistema español se otorga cuando el alumno aprueba 4º de la ESO, el décimo grado estadounidense.
La escuela en la que Margaret estudió cuando era menor de edad, la Catholic Central High School de Grand Rapids (Michigan), organizó un acto solemne el 29 de octubre para hacer entrega del título de Secundaria de manera honorífica. Feliz, sonriente y muy emocionada, delante de sus familiares y amigos, la anciana no pudo contener las lágrimas de alegría cuando recibió el diploma que acreditaba haber terminado sus estudios preuniversitarios a los 97 años edad.
Margaret se vio obligada a abandonar la escuela a los 17 años, sin completar la Educación Secundaria, para cuidar de su madre Katherine, que estaba enferma de cáncer, y a sus tres hermanos. Ella se quedaba cocinando, limpiando la casa y lavando ropa mientras su padre, Leo, trabajaba para mantener a toda la familia.
Dejar de estudiar fue una decisión difícil de sobrellevar para Margaret y que lamentó durante el resto de su vida. Ahora, sin las obligaciones del pasado, se ha podido quitar esa espinita que se le quedó clavada, haciendo un pequeño esfuerzo y recibiendo el apoyo de su familia.
“Os lo agradezco desde lo más profundo de mi corazón”, dijo durante el acto de graduación, según informa el diario Michigan Live. Su experiencia vital ha sido de utilidad en sus estudios porque, según afirma el periódico estadounidense, siempre ha destacado por sus buenas notas.
Final feliz para una mujer que ha sido un ejemplo para muchos y que rompe con la imagen de un estudiante menor de veinticinco años. El suyo no es un caso aislado. Porque los tiempos han cambiado y la posibilidades de formarse también.
Según datos oficiales, solo en España, un total de 214.894 alumnos se matricularon en la ESO para adultos y, por lo tanto, aspiraban a obtener el título académico oficial durante el curso 2013-14. Dentro de la oferta formativa para sacarse la ESO a distancia, la reciente implantación de la modalidad online ha contribuido a reducir el número de adultos sin un título que se considera básico, y cada vez son más los que se decantan por esta opción que hasta hace poco era desconocida.
Los alumnos matriculados en INAV, el Centro Oficial de Educación Secundaria Online, para mayores de 18 años, han sabido beneficiarse de la evaluación continua y las nuevas tecnologías del centro para estudiar el graduado escolar a través de internet, dado que les resulta más fácil organizar sus compromisos familiares y profesionales. La disponibilidad de tiempo ha dejado de ser un condicionante para retomar los estudios.